El Nido

La mañana llegó con una luz que en aquellos días sólo podía encontrarse en Roma. Y en el Nido, cómo llamaba Nimbus al campanario donde se refugiaba. Aquella Iglesia fué abandonada hace mucho, y nadie iba jamas, salvo algunos sin techo como él al principio, pero cuando entraban el Nubarrón, como conocian a Nimbus en Roma, creaba extraños fenómenos con sus poderes si se acercaban a la torre, pues no le importaba que se quedaran por el resto del edificio.

Ocurrió que el Sol comenzó a calentar las campanas que pendían sobre Nimbus , provocando que se despertara, algo sudoroso, la mañana era cálida, por no decir calurosa. Se frotó los ojos y tras gruñir se sentó sobre aquel lío de mantas que tenía allí preparadas. Se puso de pie y echó un vistazo a Roma mientras se desperezaba, estaba bastante contento con su Nido, desde allí podía ver alguno de los edificios más importantes de Roma , cómo la Basílica de San Pedro del Vaticano , el Coliseo y el Panteón de Agripa.

-Bueeeeno~, pues ya llegó otro día

Se acercó a un pequeño canasto en el que había algunas frutas robadas, como manzanas , fresas y moras, de allí cogió una manzana y abrió la trampilla para bajar del campanario.

Justo antes de entrar por el hueco de la trampilla miró su armadura. -Cuidame este sitio, ¿quieres?

Y comenzó su descenso, cerrando bien la trampilla tras de sí. Tardaba varios minutos en bajar, no era nada corto. Había cientos y cientos de escalones que giraban hasta la primera planta del edificio , girando en forma de caracol. Nimbus los bajaba con una soltura increible, pues los bajaba y subía varias veces todos los días y hacía tiempo que dejó de parecerle pesado. Al fin llegó al final, y salió de la iglesia sin demorarse un segundo, mordiendo su manzana.

Nimbus condujo a Metisno a través de algunos callejones algo estrechos y pocos transitados , alargando así un poco más el camino hacia la iglesia abandonada en la que decidió instalarse Nimbus tiempo atrás.

Durante el camino, Nimbus explicó a Metisno que había hecho alguna que otra diablura, por lo que no pudieron ir por el camino corto.

Finalmente llegaron. Nimbus se acercó a la puerta de madera toda llena de arañazos y astillas levantadas, incluso tenía un agujero en la parte de abajo, por el que a veces entraba algún gato. La puerta chirrió y depués de que Metisno hubiese entrado la cerró, o mas bien la encajó, aquella puerta había perdido hace mucho la capacidad para cerrarse.

En la nave central de la iglesia había un palo sostenido sobre otros dos , y debajo una mancha de carbón, allí era donde Nimbus preparaba la cena.

Durante el ascenso por la torre del campanario, Nimbus explicó que a veces entraban otros mendigos allí, pero que eran amigos suyos y que nunca se acercaban a la torre. -Además, aunque lo hicieran... Dijo Nimbus cuándo llegaron al final, señalando la trampilla que daba al campanario. Entonces , se oyó un sonido metálico sobre la madera de la trampilla, como si algo se apartara de encima. Nimbus la abrió y subió, luego le dijo a Metisno:-Esto es lo que quería enseñarte...se coloca encima de la trampilla cuando me voy, y se vuelve enormemente pesada, más de lo que ya es de por sí...cómo si quisiera guardar mi escondite en secreto.Cuando voy a entrar, se aparta nuevamente.

Fué entonces cuando Nimbus comprendió que desde allí Metisno no podría ver a lo que se refería, pues aún no subió, así que le tomó fuerte de la mano y le ayudó a subir. Allí estaba , la armadura del Lince.-...¿Sabes algo de esto? Preguntó a Metisno con la esperanza de que alguien pudiese resolver sus dudas al fin.

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OFF: Siento haber controlado un poco el pj de Metisno, pero cuento con su permiso.

Metisno llegó a el lugar a donde Nimbus lo guío, el peliazul no se opuso a seguir a aquel chico hasta ese lugar que parecía una iglesia abandonada o muy mal cuidada, Nimbus guió a Metisno hasta el campanario, donde parecía haber un nido... o eso observó Metisno, tuvieron que subir varias escaleras pero llegaron al lugar que Nimbus quería enseñar al peliazul, Nimbus se subió en un lugar y le dijo a Metisno que observara sin embargo él no podía ver nada desde donde estaba, entonces Nimbus le extendió la mano y Metisno subió... El patriarca no lo podía creer, lo que estaba observando, era una cloth, la armadura de bronce del lince, el peliazul sentía una gran satisfacción al ver otro caballero de Athenea un aliado más un personaje más que lo ayudaría con su misión o su destino...

)- Por fin una armadura de un santo, entonces no me equivoqué lo que sentí en él si era cosmos, él es un caballero, un santo de Athenea...-(

Pensaba Metisno mientras veía la cloth del Lince... Metisno guardó silencio por unos minutos, luego volteo a ver a Nimbus y le dijo:

- Esta es una armadura de bronce, así se le conoce o se les conocía a estas armaduras en el santuario, es increíble que halla una en Roma, ¿como la conseguiste? -

Preguntaba Metisno mientras miraba a Nimbus, el peliazul no esperaba una respuesta larga, quizás ni esperaba que le respondiera pues le bastaba con ver un caballero más...

El chico no podía creer que por fin hubiera obtenido las respuestas que tanto necesitaba. Metisno se la dió al fin, pero el joven tenia tantas preguntas que hacerle aún...Estaba impresionado por la facilidad con que Metisno la reconoció , pero más aún de que el propio Metisno estubiera aún más sorprendido de encontrarla.

-Entonces...¿hay más de estas?

Preguntó con gran curiosidad , pero no dió tiempo a Metisno a que respondiera esto cuándo comenzó a explicarle.

-Y no sé cómo la obtuve...la armadura apareció...yo intentaba ayudar a una chica y esta apareció, se colocó delante suya como protegiendola , luego se desmontó y cubrió mi cuerpo.

Se dió la vuelta, rascandose la cabeza y mirando Roma, con sus ojos aún llenos de dudas y con miles de preguntas rondando su cabeza.

-Por favor...explícame todo esto...¿Que es eso del santuario? Y lo de ...¿Patriarca? Comentaste algo así antes.

Durante mucho tiempo había ocultado su armadura en aquel lugar, y al fin podía encontrarle un significado a todo. Ahora sabía que su destino no era el de cualquier otro. Sabía que que algo importante tenía que hacer, que ahora tenía una responsabilidad, o eso adivinaba por la preocupación de Metisno. La armadura lo escogió. Ahora solo faltaba saber para qué...y el por qué...Quizá el tiempo lo podría explicar.

Nimbus se dió la vuelta y volvió a quedar cara a cara con Metisno. -Hay otra cosa más...

Nimbus mostró la palma de sus manos y ambas comenzaron a expusar cosmos, aunque esto era algo de lo que Nimbus no era consciente. Su cosmos provocó que el aire alrededor de estas se transformara en un viento de color plateado, luego mediante la concentración de dicho cosmos consiguió que el aire se solidificara, transformandose en metal. Creó varios ''pedruscos'' de acero que calleron en sus manos, luego los dejó caer al suelo y se disolvieron, convirtiendose en aire nuevamente.

Metisno escuchó todas las preguntas que le decía Nimbus y tenía las respuestas para todas, sin embargo, al ver lo último que hizo Metisno se sorprendió al ver que alguien que no supiera nada sobre los santos pudiese hacer algo como eso...

Metisno dió un paso al frente miró a Nimbus directamente y le dijo:

- primero, pues si hay más como esa hay varias esta es una armadura de bronce se supone que son las más débiles, sin embargo según me contó mi maestro algunos portadores de estas armaduras han logrado grandes cosas, sin embargo las armaduras son más frágiles, luego están las de plata y por último las de oro... Hmm ya veo por eso obtuviste tu armadura, la naturaleza de los santos de bronce plata y oro es proteger, tu quisiste proteger a esa chica y por eso la armadura se materializo frente a ti, se puede decir que ella te escogió... El santuario, eso fue un lugar maravilloso donde habían trece templos doce de ellos guardaban las armaduras doradas en el último se encontraba el patriarca y la estatua de Athenea la diosa que nos guía, el Patriarca es quién tomaba las ordenes en el santuario todos le debían respeto y era el más fuerte de los caballeros de Athenea... Por lo menos así era antes, eso que haces... es asombroso ya sabes controlar tu cosmos, y no sabías nada de lo de las armaduras, ya veo por que Athenea y la armadura te escogieron-

Decía Metisno con un rostro serio respondiendo las preguntas de Nimbus y comentandole sobre lo que hizo...
)- Es sorprendente como sabe utilizar su cosmos, definitivamente será un gran aliado-(

- ¿Sabes hacer algo más con tu cosmo aparte de esto?- Decía Metisno mientras observaba a Nimbus atentamente

Nimbus se decepcionó al oir a Metisno.

-Pensé que era el único que tenía cosmos...como se llame...y sí se hacer más cosas, pajaritos, cuchillos, agujas, miniaturas de edificios....

Hablaba decepcionado pues pensó que aquel aire y el metal que creaba eran ''cosmos'' ya que el peliazul no le explicó lo que era cosmos, por lo que Nimbus creyó que se trataba de su poder y no la energía con que lo ejecutaba...Confundiendose así enormemente.

Se apoyó con la decepción sobre uno de los vanos del campanario.Sus ojos se perdieron mirando el horizonte de la ciudad romana, mientras no dejaba de pensar que no era tan especial como creía , la verdad, era un chico al que le gustaba llamar la atención, y se sentía especial y unico con sus poderes , por ello, imaginar que otros hacían lo que él le resultaba triste. -¿Tu también haces cosas con cosmos ? Sabes hacer ...¿tigres?...¿o peces? Le preguntó a Metisno con la esperanza de que este le respondiese que no, siendo entonces más habil que él con aquello del cosmos. Ya que otros lo hacian, quería ser mejor que ellos, era una actitud infantil, y se puso incluso de morros, parecía un niño de 5 años y no uno de casi 18

OFF: He tenido problemas técnicos siento la demora.

Metisno escuchaba las palabras que decía Nimbus, sin embargo no entendía porque el chico se comportaba así, no sabía si era un simple juego de Nimbus...

- el cosmos es algo que todos los guerreros poseen, sin embargo, manifestarlo de esa manera, pues no he visto a otro poder hacerlo -

Le decía al chico mientras observaba aquella armadura y decía:

- ¿Haz combatido usando eso?¿ o nunca has luchado? -

Decía Metisno mientras se acercaba a la puerta por donde había ingresado...

)- Creo que podría entrenar con él si lo necesita -(

Nimbus se emocionó cuando Metisno le explicó que aquella habilidad que tenía era única y genuina, pero luego Metisno le preguntó si alguna vez se sirvió de ese poder para luchar, entonces se tornó nuevamente un poco triste, miró el suelo, como avergonzado.

-Una vez...pero fue sin querer

Nimbus comenzó a recordar cómo cerró los ojos desesperado y al abrirlos, aquella agitada noche, todo a su alrededor estaba lleno de lo que parecian ser cuchilla que más tarde se disolvieron, pasando a ser humo plateado.

-Me atacaron unos hombres, porque defendí a una mujer...Tenian cuchillos y entonces...ocurrió, todo se lleno de miles de puas y otras cosas con pinchos, y allí entonces apareció esta armadura, delante de la chica, cómo si no quisiera que mi poder la dañase...cómo si me ayudase a protegerla , ese fué el día que descubrí el verdadero alcance de mis habilidades...

Luego levantó la cabeza y en un tono serio dijo :-No te preocupes...esos tipos estaban bien, ni siquiera tenían heridas graves, creo que se largaron por el susto....